lunes, 17 de diciembre de 2007

De cara al infinito

Des Integración en lo inconmensurable

A descansar se fue el buey que empujaba
El jilguero sigue llamando desde su lugar
El jilguero es este punto sensible
Desde donde me expreso
No es un llamado hacia aquí
Es un simple gozoso “eureka”
Y una seña en el camino
El infinito ya está aquí
El diafragma se abre y deja ver
Los portales son más amplios y libres
Más, en este, no se puede ingresar con polvo de antaño.
Es necesario entrar con el cristal limpio
Las frustraciones son de otro mundo
Livianito, livianito la línea está ahí.

Hugo Omar

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